El Ayuntamiento de Madrid ha dado un paso significativo hacia la mejora de la calidad de vida en la capital española al aprobar una consulta pública para la formulación de la nueva Ordenanza de Convivencia. Este proceso, respaldado por la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz, busca recoger las opiniones y sugerencias de la ciudadanía durante un periodo de 30 días naturales a partir de su anuncio en el Boletín Oficial del Ayuntamiento de Madrid (BOAM).
La intención del Ayuntamiento es preservar a Madrid como una metrópoli vibrante en la que se pueda vivir, trabajar y visitar con una calidad de vida óptima, protegiendo el derecho de todos los ciudadanos al disfrute seguro y respetuoso de los espacios públicos y los bienes y servicios de titularidad pública. El enfoque de la normativa planificada es permitir una convivencia armónica donde predominen el respeto y la pluralidad de formas de vida.
Durante la rueda de prensa, Sanz subrayó que la futura ordenanza busca establecer un marco regulatorio claro para fomentar un sano desarrollo de actividades en el espacio público, evitando conductas incívicas. Se propone un texto integral que no solo facilite su comprensión y aplicación, sino que también brinde seguridad jurídica, previendo los desafíos asociados al crecimiento urbano de Madrid y anticipando posibles tensiones futuras.
El proceso para conseguir la mejor versión de esta norma incluye un extenso diálogo con diversos actores sociales. La vicealcaldesa anunció que se consultarán entidades representativas como sindicatos policiales, asociaciones vecinales, organizaciones del tercer sector, plataformas afectadas por conductas irrespetuosas, entidades deportivas y culturales, junto con organizaciones empresariales y educativas.
Asimismo, se contemplan modificaciones en las disposiciones sancionadoras de comportamientos reconocidos en normativas previas, como el vandalismo en pintadas o la venta ambulante ilegal. Además, se abordarán prácticas que actualmente carecen de definición normativa clara, como el uso inadecuado de instalaciones deportivas, zonas verdes o parques infantiles.
La consulta pública se llevará a cabo a través de la plataforma digital Decide Madrid, presentando una oportunidad para que los ciudadanos expresen su visión sobre la reglamentación futura. Entre las preguntas planteadas, se preguntará si el Ayuntamiento dispone de normativas adecuadas para la convivencia y qué conductas deben regularse para mejorar la vida en común.
Se plantearán temas específicos como el vandalismo, el consumo de alcohol en espacios públicos, la mendicidad organizada o los grafitis, generando un debate esencial para el desarrollo ordenado y participativo de la ciudad. Madrid da así un paso importante hacia la consolidación de unas normas de convivencia que miran hacia el futuro de una ciudad que continúa creciendo y evolucionando.