En un esfuerzo por preservar el patrimonio histórico de la región, el consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Mariano de Paco Serrano, visitó hoy uno de los conjuntos arquitectónicos más relevantes, cuya historia se remonta a la época musulmana. Durante su visita, de Paco Serrano explicó los trabajos de restauración ya finalizados y anunció que a partir de enero de 2025 comenzarán las obras de renovación de las pinturas murales y elementos decorativos de la capilla del inmueble.
Este singular espacio histórico, que ha sido testigo del paso del tiempo, albergó en su momento un conjunto agropecuario gestionado por los monjes de La Cartuja de El Paular. Aunque inicialmente tenía una mayor extensión, en la actualidad se conservan cuatro edificios de los siglos XVII y XVIII: el edificio principal, el edificio central, la capilla y los establos. Además, se pueden apreciar construcciones más antiguas, como las murallas del siglo IX, que atestiguan su uso como enclave militar.
El más emblemático de todo el complejo es el edificio central, con su característica planta cuadrada y una magnífica cubierta piramidal revestida de tejas. Sin embargo, el paso del tiempo no ha sido benigno con esta estructura, que presentaba derrumbes parciales y signos de pudrición, afectando gravemente al forjado. Por este motivo, las autoridades decidieron priorizar su restauración, además de actuar en la cubierta de la capilla. También se han llevado a cabo trabajos en la portada de acceso y en las bóvedas de la bodega ubicada en el sótano, que es un vestigio de la arquitectura subterránea de la época.
Durante este último año, se ha puesto empeño en recuperar las cubiertas y galerías del edificio principal, que da acceso a las diversas dependencias internas, como la cocina, las habitaciones de los monjes cartujos y el oratorio, encargándose de devolverles su aspecto original y asegurar su estabilidad estructural.
Este proyecto de restauración no solo busca honrar el pasado de este imponente complejo, sino también abrir nuevas posibilidades para el turismo cultural y el disfrute del público en general, conservando la esencia de un lugar que todavía susurra las narrativas de sus días gloriosos. El compromiso de las autoridades y la comunidad local promete devolver el esplendor a este tesoro arquitectónico, cuya renovación se espera que ilumine el corazón cultural de la región una vez concluidos los trabajos en 2025.