Investigadores de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) han dado un paso significativo en el campo de la comunicación cuántica al desarrollar un innovador sistema que podría cambiar radicalmente la seguridad de los mensajes en situaciones críticas. Esta iniciativa se enmarca dentro del proyecto internacional COMPHORT, que cuenta con el respaldo financiero de la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y el apoyo de la red europea de tecnologías cuánticas ERANET-QuantERA.
El núcleo de este avance es un dispositivo capaz de operar a temperatura ambiente, que emite fotones individuales esenciales para garantizar el cifrado en las comunicaciones cuánticas. A diferencia de los sistemas preexistentes que requieren enfriamientos extremos, la nueva tecnología permite un funcionamiento más sencillo y económico, gracias al uso de defectos en el nitruro de boro hexagonal como emisores cuánticos. Carlos Antón, coordinador del proyecto, explica que estos fotones únicos son imposibles de dividir o clonar, asegurando una máxima seguridad en la transmisión de datos.
El plan es que este dispositivo sea compacto y accesible, utilizando pulsos eléctricos en lugar de láseres para su excitación, lo cual simplifica el diseño, lo robustece y abarata sus costes de producción.
A fin de demostrar la eficacia de este sistema, el equipo tiene previsto llevar a cabo pruebas en pleno centro de Berlín, donde los mensajes serán transmitidos mediante fotones individuales por el aire. Este ensayo se centrará en la Distribución Cuántica de Claves (QKD), una técnica que promete hacer la información completamente inviolable. Los ensayos están diseñados para validar la tecnología en enlaces ópticos de hasta 750 metros, especialmente en densos entornos urbanos, lo que podría demostrar su utilidad en situaciones de emergencia como desastres naturales, donde las infraestructuras de comunicación suelen colapsar.
Las aplicaciones potenciales de la tecnología de COMPHORT se extienden mucho más allá de los escenarios de emergencia. Su capacidad para asegurar las comunicaciones tiene un considerable potencial en campos como la seguridad de vehículos autónomos, drones y aeronaves, así como en entornos temporales como hospitales de campaña, donde tanto la movilidad como la seguridad son aspectos críticos. Carlos Antón destaca que este sistema cuántico no solo ofrece un avance en la comunicación segura, sino que también evidencia la versatilidad de la tecnología cuántica en situaciones complejas.
El proyecto, que arrancó en julio de 2024 y tiene previsto extenderse hasta junio de 2027, es fruto de una cooperación internacional en la que participan especialistas de diversas instituciones y empresas de España, Alemania, Turquía y el Reino Unido. Entre las entidades colaboradoras destacan la Technische Universität Berlin, la University of Bristol y la empresa Nanoplus Advanced Photonics. Se espera que para finales de 2025 esté lista la primera versión de una fuente de fotones individuales ultraeficiente, marcando un hito significativo en el camino hacia la aplicación práctica de la tecnología cuántica.
Este esfuerzo resaltará la posición de España como líder en la investigación cuántica a nivel global, impulsada por el apoyo de la Agencia Estatal de Investigación y su decidida apuesta por proyectos internacionales de colaboración. COMPHORT no solo busca revolucionar la seguridad en las comunicaciones, sino también abrir nuevas vías para la integración de la tecnología cuántica en la vida cotidiana.