Este martes, Hamás ha realizado un anuncio estremecedor al revelar su intención de entregar a Israel los cuerpos de los niños Ariel y Kfir Bibas, de 9 meses y 4 años, junto al de su madre, Shiri. La familia Bibas fue secuestrada durante un ataque el pasado 7 de octubre de 2023, en medio de las hostilidades entre Israel y Hamás. En declaraciones pregrabadas, Khalil al-Haya, líder de Hamás, señaló que esta entrega es parte de los preparativos para la segunda fase de las negociaciones de un acuerdo más amplio, en el contexto del actual alto el fuego. Este gesto, aunque trágico, representa un complejo paso en una escalera de tensiones que ha marcado las relaciones en la región.
Mientras tanto, el grupo yihadista también ha informado sobre la futura liberación de seis prisioneros israelíes, incluidos Hisham al Sayed y Avraham Mengistu, a cambio de prisioneros palestinos. Estos dos, un etíope-israelí y un beduino israelí, fueron capturados en 2014 y 2015 en la Franja de Gaza, respectivamente. Este intercambio, anunciado por el Foro de las Familias de los Rehenes, refleja una dinámica intrincada y desafiante en las negociaciones en curso. La noticia, pese a suscitar cierta esperanza para las familias afectadas, se ve empañada por la congoja del anuncio previo que parece confirmar la muerte de los más vulnerables del secuestro, dejando una profunda marca de dolor y revuelo internacional.
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