Madrid se consolida como un referente en gestión de residuos tras los resultados obtenidos por la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360. Desde su implementación en 2019, la ciudad ha experimentado un notable avance en la gestión de residuos, reduciendo considerablemente la proporción de residuos no reciclables y superando los objetivos marcados por la Unión Europea en este ámbito.
El cambio más significativo se observa en la fracción resto, constituida principalmente por residuos no reciclables. En 2019, estos representaban un 69,12 % del total de los residuos recogidos en la capital. Para 2023, este porcentaje se ha reducido al 48,74 %, y datos parciales de 2024 indican una disminución hasta el 45,25 %. Este notable descenso de más de 24 puntos porcentuales sugiere que las políticas integradas y los nuevos contratos de gestión de residuos están produciendo resultados tangibles.
Asimismo, la fracción orgánica ha experimentado un crecimiento sin precedentes, pasando del 9,64 % en 2019 al 23,35 % en 2023, y alcanzando el 26,42 % en los primeros nueve meses de 2024. Este incremento refleja un cambio significativo en la gestión y separación de los desechos orgánicos, que ha permitido duplicar la cantidad de residuos orgánicos recogidos, de 116,369 toneladas en 2019 a 263,220 en 2023.
El plástico, metal y brik también han mostrado una evolución positiva, aumentando su representación del 7,97 % en 2019 al 11,21 % en 2023 y los meses iniciales de 2024. Esto se traduce en un incremento de 30,000 toneladas recogidas respecto a 2019. En la misma línea ascendente, la fracción de papel cartón ha aumentado su participación, pasando del 5,36 % al 6,58 % entre 2019 y 2023.
El vidrio y los puntos limpios no quedan atrás; el primero ha incrementado su volumen de recogida a 62,532 toneladas en 2023 frente a 59,451 en 2019, incrementando su participación dentro del total de residuos al 5,55 %. Los puntos limpios, con un aumento de casi 3,000 toneladas, ahora representan el 1,12 % de los residuos recogidos.
Una mención especial merece la gestión de residuos textiles, con la instalación de 1,342 contenedores que permitieron recoger 2,718 toneladas de ropa en 2023, frente a las insignificantes 13 toneladas de 2019. Este esfuerzo se traduce en un cambio radical en la gestión de los residuos textiles, consolidándose como un importante logro para la ciudad.
El progreso ha sido posible gracias a los nuevos contratos de recogida implementados en 2022, que han transformado significativamente la frecuencia y eficiencia de la recogida de residuos. La fracción orgánica, por ejemplo, pasó de no tener recogida específica a tenerla siete veces por semana. Asimismo, la fracción de plástico, metal y brik casi duplicó su frecuencia, mientras que la fracción resto redujo su recogida semanal gracias a una gestión más eficiente y separada.
Estos avances renuevan la esperanza de Madrid para alcanzar los objetivos europeos del 55 % de recogida selectiva en 2025, situando a la capital española a la vanguardia de la sostenibilidad urbana y el manejo eficaz de desechos.
