En un esfuerzo coordinado para mejorar la seguridad laboral y reducir la siniestralidad en el entorno de trabajo, las autoridades han presentado un ambicioso plan que entrará en vigor entre 2025 y 2028. Este proyecto, resultado de un consenso con los agentes sociales, se centra en fomentar una cultura de la seguridad cimentada en la formación, la prevención activa y la colaboración empresarial.
Albert, portavoz del plan, detalló que se han establecido varias líneas de actuación con objetivos específicos. Una de las principales metas es eliminar los comportamientos de riesgo y corregir condiciones inseguras empleando las últimas tecnologías disponibles. Este enfoque proactivo buscará reducir al mínimo los incidentes laborales mediante la identificación oportuna de potenciales peligros.
En el corazón de esta iniciativa se encuentra la promoción de una cultura de prevención y la incorporación de hábitos saludables en los lugares de trabajo. Esto incluye un enfoque particular hacia pequeñas y medianas empresas (pymes) y trabajadores autónomos, sectores a menudo más vulnerables ante lacras de la seguridad laboral.
Para asegurar el éxito del plan, se incrementará la cooperación con las empresas mediante programas de asesoramiento continuo, proporcionando apoyo y recursos necesarios para una correcta adaptación a las normas de seguridad vigentes. Además, la prevención de riesgos laborales será integrada en el currículo educativo de los centros de Educación Secundaria y Formación Profesional, asegurando que las futuras generaciones comprendan la importancia de un entorno de trabajo seguro.
El Instituto Regional de Seguridad y Salud en el Trabajo (IRSST), bajo la supervisión de la Consejería de Economía, Hacienda y Empleo, será el organismo encargado de la implementación y evaluación de este plan. Su rol será crucial en la ejecución de las acciones delineadas, asegurando un cumplimiento riguroso de las medidas de seguridad.
Este plan llega en un contexto favorable: en 2023, la región registró el índice de siniestralidad laboral más bajo entre todas las comunidades autónomas del país, un 23,8% menor que la media nacional. De 2019 a la fecha, el índice de accidentes durante la jornada de trabajo ha disminuido un 12,7%, superando ampliamente la reducción estatal del 6,9%.
La apuesta por la seguridad en el trabajo es evidente, y las expectativas puestas en este nuevo plan director son altas. Las autoridades confían en que, trabajando de la mano con todos los sectores implicados, se podrá seguir avanzando hacia entornos laborales cada vez más seguros y saludables para todos los trabajadores.