Airbnb experimentó un retroceso en su valoración bursátil tras la publicación de resultados insatisfactorios para los inversores. La plataforma informó de un crecimiento del 6% en ingresos durante el primer trimestre, alcanzando los 2.272 millones de dólares, aunque una serie de factores, como el año bisiesto y las fluctuaciones en el tipo de cambio, matizaron esta cifra. Sin embargo, los beneficios disminuyeron un 42%, principalmente debido a un aumento en los gastos de personal y pérdidas relacionadas con inversiones en empresas no cotizadas. La política económica errática de Donald Trump ha impactado negativamente a la industria del turismo, con una notable caída en los viajes de canadienses a Estados Unidos, aunque las reservas hacia México han aumentado.
Airbnb anticipa un crecimiento entre el 9% y el 11% para el segundo trimestre, beneficiado por la temporada alta de Semana Santa. Pese a esto, la empresa advierte de una desaceleración en el crecimiento de reservas de noches y experiencias. En un contexto global de incertidumbre económica, Airbnb continúa analizando el impacto potencial de factores geopolíticos y económicos adversos. A futuro, la compañía planea diversificarse invirtiendo hasta 250 millones de dólares en nuevos negocios. Inspirado por el modelo de Amazon, Brian Chesky, CEO de Airbnb, busca convertir la aplicación en un recurso integral para necesidades de viaje, explorando nuevos servicios que complementen el negocio principal.
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