El Consejo de Ministros ha aprobado una nueva estrategia para la Inspección de Trabajo que se implementará de 2025 a 2027. Esta medida busca fortalecer el cuerpo de supervisores laborales con la incorporación de 554 inspectores y subinspectores, además de destinar 28,5 millones de euros en mejoras tecnológicas. La inversión incluye la creación de un laboratorio de informática forense para obtener evidencias digitales y el desarrollo de algoritmos para controlar el fraude. Estos planes trianuales, que requieren revisión al concluir el período, se centran en dos ejes: áreas de actuación como relaciones laborales, seguridad y salud, y medidas organizativas para los inspectores.
Las denuncias recibidas a través del buzón en la web de la Inspección han crecido un 43% desde 2021, reflejando la creciente participación ciudadana. En 2023, se finalizaron 651.531 expedientes, superando en un 5% los objetivos anuales. Las principales acciones se realizaron en prevención de riesgos laborales, seguido por la seguridad social y la economía irregular. Estas actuaciones han mejorado las condiciones laborales de más de un millón de trabajadores, con 100.982 personas dadas de alta en la Seguridad Social. El año culminó con una recaudación de 936 millones de euros a través de sanciones y mejoras de cotización.
Leer noticia completa en El Pais.