El inicio de la tregua en la Franja de Gaza ha permitido que los equipos de rescate comiencen a recuperar cuerpos que habían permanecido sepultados bajo los escombros tras 15 meses de conflicto. Esta pausa en las hostilidades coincide con un viaje de Benjamin Netanyahu a Washington, donde se reunirá con Donald Trump para discutir la segunda fase de la tregua. Según cifras actualizadas por las autoridades de Gaza, más de 61.709 personas han muerto debido a los bombardeos y operaciones militares. De estos fallecimientos, 17.881 fueron niños, incluidos 214 recién nacidos. Además, más de 2 millones de personas han sido desplazadas en repetidas ocasiones, enfrentando condiciones extremas sin servicios básicos.
El jefe de la Oficina de Información del Gobierno de Gaza, Salama Maarouf, ha declarado que se han recuperado los cuerpos del 76% de los palestinos muertos, pero aún se estima que 14.222 personas permanecen atrapadas bajo los escombros o en áreas inaccesibles. Mientras tanto, las conversaciones de paz entre Israel y Hamás continúan bajo un alto el fuego frágil, que ha proporcionado un respiro temporal a un conflicto desgarrador. El conflicto se intensificó el año pasado tras un ataque de Hamás al sur de Israel que resultó en la muerte de aproximadamente 1,200 personas y el secuestro de 250, lo que subrayó la complejidad de las tensiones en la región. La comunidad internacional observa con cautela las próximas fases de la tregua, esperando una solución duradera.
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