Dos empleados de la Embajada israelí en Washington fueron asesinados a tiros el miércoles por la noche cerca de un museo judío en la capital estadounidense. Las víctimas, Yaron Lischinsky y Sarah Lynn Milgrim, eran pareja y estaban a punto de comprometerse, según el Ministerio de Exteriores israelí. El ataque es investigado como un posible crimen de odio, con Elias Rodriguez detenido como principal sospechoso. Kristi Noem, secretaria de Seguridad Nacional, aseguró que el atacante gritó «Palestina libre» al ser arrestado. Las autoridades israelíes atribuyeron el hecho al aumento del antisemitismo vinculado a la situación en Gaza.
El incidente ha despertado fuertes reacciones, tanto en Estados Unidos como en Israel. El embajador de Israel en Washington, Yechiel Leiter, lamentó la pérdida de la joven pareja, mientras que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se comprometió a reforzar la seguridad en las embajadas. La fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, indicó que el sospechoso será procesado con todo el peso de la ley. Este crimen ocurre en un contexto de creciente tensión internacional por el conflicto en Gaza, donde Israel ha lanzado una nueva campaña militar que ha resultado en una escalada de críticas y tensiones diplomáticas.
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