El Celta de Vigo logró un empate crucial ante el Atlético de Madrid con un gol vital de Iago Aspas, quien igualó el récord de 533 encuentros con el club. Aspas, máximo goleador histórico del Celta, entró al campo cuando su equipo perdía 0-1 y, en solo cuatro minutos, anotó un gol decisivo tras una jugada con Borja Iglesias y Óscar Mingueza. Este resultado permite al Celta salir momentáneamente de los puestos de descenso en La Liga, en un inicio de temporada complicado con seis empates y dos derrotas. Aspas reconoció la necesidad de una victoria en el campeonato, pero se mostró positivo con el desempeño del equipo, sobre todo por la superioridad numérica que mantuvieron durante gran parte del partido.
El entrenador Claudio Giráldez apostó por Borja Iglesias como titular, quien estuvo activo en el ataque, pero sin concretar oportunidades claves. El partido se complicó para el Atlético después de que el defensa Clément Lenglet fue expulsado antes del descanso por doble amonestación. En la segunda mitad, la entrada de Aspas revitalizó al Celta gracias a su capacidad para cambiar el ritmo del juego, aunque no lograron anotar más. A pesar del empate, el ambiente festivo en Balaídos culminó con una emotiva ovación para Aspas, quien recibió una camiseta conmemorativa por su número de partidos, destacando su lealtad y aportes al club celeste desde sus inicios.
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