La Sierra de Guadarrama, un tesoro natural a las afueras de Madrid, se convierte en un escenario impresionante durante los meses de invierno, cuando la nieve reviste sus cumbres de un manto blanco que invita a la aventura. Uno de los senderos más destacados de la zona asciende a una cumbre de 1.900 metros, ofreciendo a los excursionistas no solo un desafío físico, sino también un viaje a través de la historia y las leyendas que envuelven la región. Este trekking, considerado uno de los más espectaculares de la sierra, ofrece vistas panorámicas impresionantes y una oportunidad única para conectar con la naturaleza en su estado más puro.
La experiencia de subir esta montaña nevada no solo recompensará a los amantes del senderismo con paisajes de ensueño, sino que también les brindará la oportunidad de sumergirse en las historias ancestrales que han dado forma a su rica tradición. La ruta, ampliamente recomendada cuando el manto nevoso cubre la sierra, se presenta como una escapada ideal para aquellos que buscan una mezcla perfecta de ejercicio, historia y naturaleza. A medida que los caminantes ascienden, son acompañados por el susurro del viento y el crujir de la nieve bajo sus pies, creando una experiencia inolvidable en uno de los parajes más icónicos de Madrid.
Leer noticia completa en El Mundo.