La Audiencia de Navarra ha dictaminado que el hombre, detenido por la muerte de su mujer en Zizur Mayor el pasado julio, cumpla prisión provisional en el domicilio designado por su familia bajo supervisión mediante un dispositivo telemático. Esto sigue al informe judicial que constata su deterioro cognitivo, lo que motivó que se reconsiderara su situación carcelaria. El caso fue inicialmente investigado como violencia de género, generando críticas de la familia y confirmación del Ministerio de Igualdad. La Guardia Civil había detenido al hombre tras su llamada al 112 donde mostró un discurso incoherente.
Respecto a la decisión judicial, se rechazó la nulidad del encarcelamiento preventivo planteada por la defensa, debido a que la resolución inicial estaba motivada por el riesgo de fuga y destrucción de pruebas. Sin embargo, la Audiencia consideró que la edad del detenido y el estado de la vivienda minimizan estos riesgos. Un informe neurológico evidenció su vulnerabilidad e incapacidad para tomar decisiones autónomas, lo que ha pesado en la decisión de cambiar la prisión convencional por domiciliaria. La Audiencia aún no determina si el caso es asesinato o muerte accidental, pendiente de análisis toxicológicos y otros elementos.
Leer noticia completa en El Pais.