En Venezuela, las fuerzas de seguridad han detenido a diez militares, incluido un general, bajo acusaciones de traición a la patria. Según informes, estos militares, pertenecientes a la Guardia Nacional Bolivariana, fueron arrestados tras ser acusados de estar implicados en actividades que incluyen ultraje a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, desobediencia agravada y abuso de autoridad. Entre los detenidos se encuentra el general de Brigada Rafael García Fernández, quien dirigía el comando de Zona N° 63 en el estado fronterizo de Amazonas. Las autoridades alegan que estos oficiales permitieron el ingreso de aeronaves no identificadas desde Brasil, lo que ha desatado un fuerte intercambio de opiniones en el sector político y militar del país.
El contexto de estas detenciones se da en un período tumultuoso tras las elecciones del 28 de julio, donde Nicolás Maduro fue declarado vencedor en medio de acusaciones de fraude. Este evento ha provocado una serie de cambios en el mando militar y político, encargando el control de la seguridad al influyente Diosdado Cabello. La lealtad de la cúpula militar bajo el mando del general Vladimir Padrino López ha sido continuamente reforzada, resultando en la detención de 163 militares acusados de conspiración. Estas acciones han desencadenado tensiones políticas, con líderes de la oposición intentando persuadir a las fuerzas armadas a reconsiderar su apoyo al gobierno, en un clima de desconfianza exacerbada por denuncias de fraude electoral.
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