El debate político en Colombia se ha encendido nuevamente tras las declaraciones del ministro del Interior, Armando Benedetti, en una cumbre de gobernadores en Yopal. Benedetti mencionó la palabra «reelección» al referirse a las estrategias del gobierno de Gustavo Petro para promover reformas sociales. Esta alusión surgió en el contexto del Primero de Mayo, cuando el presidente Petro planea formalizar una consulta popular para revivir una reforma laboral archivada por el Congreso. Al usar «reelección», un término sensible y constitucionalmente prohibido en Colombia, Benedetti causó revuelo político. La oposición ha criticado a Petro, temiendo que busque permanecer en el poder más allá de 2026, recordando los intentos de reelección de Álvaro Uribe. Benedetti aclaró que su intención era enfatizar la importancia de escuchar al pueblo en la aprobación de reformas sociales, no referirse a una extensión del mandato presidencial.
En otro frente, durante la misma cumbre, Benedetti abordó el tema de la «paz total», una política clave del gobierno que busca negociar con todos los grupos armados del país simultáneamente. Admitió que el plan no ha avanzado como se esperaba y estableció un plazo de 20 días para que los grupos armados se concentren en áreas designadas, de lo contrario, se interrumpirán las negociaciones. Esta declaración fue interpretada como un reconocimiento del fracaso de la estrategia de paz del gobierno, aunque Benedetti luego matizó diciendo que sus palabras fueron malinterpretadas. El gobierno ha decidido no prorrogar el cese al fuego con las disidencias del Estado Mayor de los Bloques y Frentes, optando por suspender las ofensivas durante un mes mientras observan el interés de las disidencias en el proceso de paz.
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