En un emocionante partido en el Coliseum Alfonso Pérez, el Getafe recibió al Real Madrid en una noche marcada por la estrategia y la paciencia. José Bordalás, técnico del Getafe, buscó controlar el ritmo del juego pidiendo calma a sus jugadores, evitando la agitación en el campo. A pesar de las dos claras oportunidades desperdiciadas por Kylian Mbappé, el plan de Bordalás se mantuvo firme mientras el conjunto local intentaba mantener a raya al poderoso ataque madridista. Xabi Alonso realizó ajustes tácticos, reservando a algunas de sus estrellas, y confiando en un ataque liderado por Mbappé y respaldado por el joven talento de Arda Güler, quien sumó su quinta asistencia a la temporada.
A lo largo del encuentro, el Real Madrid trató de imponer su estilo de juego, con Vinicius sumando intensidad en la última media hora desde el banquillo y Rodrygo combinándose con Mbappé. Sin embargo, el Getafe resistió con una defensa férrea hasta que una expulsión de Nyom abrió la puerta para que Güler asistiera a Mbappé, quien logró su 15º gol en 11 partidos. A pesar del dominio madridista y la eficacia de Mbappé, el encuentro se vio envuelto en polémica por la expulsión de Nyom, que Bordalás consideró injusta, reflejando la tensión y la estrategia que definieron una noche de fútbol en Getafe.
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