La Generalitat de Cataluña y el Ayuntamiento de L’Hospitalet de Llobregat han logrado desbloquear el ambicioso proyecto para el semisoterramiento de la Gran Vía, cinco años después de su aprobación inicial. Este plan, anunciado tras una Comisión Bilateral entre ambas administraciones, tiene como objetivo conectar estratégicamente el hospital de Bellvitge, el Instituto Catalán de Oncología y el campus de la Universitat de Barcelona en un esfuerzo por impulsar el Bioclúster de Innovación y Salud en la región. Las obras, previstas para iniciar en 2026 y culminar en 2030, buscan transformar 95,86 hectáreas en un polo de investigación e innovación, creando 50,000 empleos y esperando generar un impacto significativo en el PIB de Cataluña.
El costo de la primera fase, que incluye el semisoterramiento, será financiado en parte por la Generalitat y el Ayuntamiento, junto con otros propietarios, quienes recibirán beneficios urbanísticos a cambio. Además, se ha acordado que el Govern asumirá responsabilidades sobre la estructura sanitaria de L’Hospitalet, fusionando las áreas asistenciales para mejorar el acceso a servicios médicos. En términos de seguridad, se planifica un aumento en la presencia policial, reforzando la lucha contra la multirreincidencia y otros delitos. Asimismo, en el ámbito educativo, se compromete a optimizar los recursos y abrir un nuevo centro de educación especial. Todos estos acuerdos se formalizarán en un convenio legal en los próximos tres meses.
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