En un escenario marcado por el conflicto en la Franja de Gaza, los habitantes del kibutz Nir Oz, uno de los más afectados por los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, han tomado la decisión trascendental de reconstruir su asentamiento y regresar a su hogar. Esta determinación se produce tras una votación en la que, abrumadoramente, se optó por restablecer la comunidad como un acto de resistencia y superación frente a la violencia sufrida. El ataque dejó una cicatriz profunda, con 46 muertos y 70 personas secuestradas, pero el deseo de volver ha prevalecido. Los habitantes exigen al gobierno israelí no solo el regreso inmediato de los rehenes, sino también un apoyo contundente para la reconstrucción de Nir Oz, proyectando transformar el kibutz en un espacio ecológico y autosuficiente, con la reconstrucción del 80% de las viviendas destruidas.
La reconstrucción del kibutz, que albergaba a unas 400 personas, se prevé compleja y extensa, con un estimado de tres años para completar las obras. El compromiso por revitalizar el área también se refleja en iniciativas similares en comunidades vecinas como Be’eri, donde otros residentes han manifestado su intención de retornar pese a la incierta situación política y militar en la región. Representantes locales han subrayado la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en el área, al tiempo que se proponen hacer del kibutz un lugar más atractivo para aquellos que todavía dudan sobre su retorno. Además, la administración del kibutz ha instado al gobierno israelí, liderado por Benjamin Netanyahu, a implementar un plan de concienciación y ayuda para quienes emocionalmente no estén listos para volver debido a los traumas vividos.
Leer noticia completa de Internacional en El Independiente.