El Ayuntamiento de Madrid avanza en su compromiso con las políticas de vivienda, un tema que ha sido declarado prioritario en el mandato vigente. La Junta de Gobierno del consistorio ha aprobado el proyecto definitivo para modificar el reglamento orgánico del Consejo Social de la Ciudad, con el objetivo de incluir, de manera permanente, una comisión técnica enfocada exclusivamente en vivienda. Esta decisión fue anunciada por la vicealcaldesa y portavoz del equipo de gobierno, Inma Sanz, argumentando la necesidad de tratar la vivienda como un ámbito específico y transversal, previamente discutido dentro de la comisión de urbanismo.
El cambio, que ha sido una propuesta unánime del Pleno del Consejo Social desde febrero de 2024, reconocerá la importancia de la vivienda como un asunto que va más allá de lo urbanístico. Con este paso, el Ayuntamiento refuerza sus políticas de vivienda en el marco del mandato 2023-2027, apoyadas desde ya por un área de gobierno específica.
El nuevo reglamento no sólo introduce esta comisión técnica de vivienda, sino que formaliza la comisión económica, que empezó a operar en 2021, y que ahora se suma de manera permanente a las ya existentes comisiones de urbanismo, medio ambiente y movilidad, innovación y servicios sociales. Otra de las novedades es la mejora de la flexibilidad organizativa, permitiendo adaptaciones en la estructura del Ayuntamiento a través de acuerdos de Pleno por mayoría simple, sin la necesidad de volver a modificar reglamentación.
Con la incorporación del titular del Área de Políticas de Vivienda al Consejo Social, se busca fortalecer la atención a este ámbito. La modificación del reglamento tiene como finalidad consolidar al Consejo Social como un espacio central para la participación de actores económicos, sociales y vecinales, orientando las políticas públicas hacia los retos actuales de la ciudad de Madrid.
Inma Sanz, durante una rueda de prensa, enfatizó la relevancia de este cambio en la estructura administrativa y su impacto positivo en la gestión de las políticas de vivienda de la capital. Este paso adelante en la organización del Consejo Social permitirá una respuesta más efectiva a las necesidades de los madrileños, adaptándose a las exigencias de una metrópoli dinámica y en constante evolución.