En la región, se ha dado inicio al proceso de admisión escolar para el curso académico 2023-2024, con la participación anticipada de aproximadamente 150.000 familias. Este año, las solicitudes podrán presentarse tanto de manera presencial en el centro de primera elección como de forma telemática a través de la web institucional de la Comunidad de Madrid. Este enfoque dual facilita a los padres la tarea de asegurar una plaza adecuada para sus hijos en los niveles de Educación Infantil, Primaria, Secundaria Obligatoria (ESO) y Bachillerato.
El calendario de admisión establece que las listas definitivas de alumnos admitidos se harán públicas el 28 de mayo para los niveles de segundo ciclo de Infantil hasta Bachillerato. Posteriormente, las listas correspondientes al primer ciclo de Infantil se anunciarán el 6 de junio. El periodo de matriculación para Infantil, Primaria y Educación Especial se extenderá del 12 al 26 de junio, mientras que para ESO y Bachillerato será del 12 de junio al 4 de julio.
El proceso de admisión sigue las directrices de la LOMLOE, priorizando la cercanía del domicilio de los padres al centro educativo como criterio principal. No obstante, la administración regional madrileña valora especialmente otros factores que fomentan la agrupación familiar y la libertad de elección educativa. Entre estos criterios se incluyen tener hermanos en el mismo centro, nacimientos múltiples, familias monoparentales, y situaciones de acogimiento, que otorgan beneficios adicionales en el sistema de puntuación.
Las familias de víctimas de violencia de género o terrorismo recibirán un extra de dos puntos, y el reconocimiento del concebido no nacido permitirá aplicar los beneficios de familia numerosa en el proceso de selección. Para los candidatos a Bachillerato, se considerará el rendimiento académico previo, subrayando el esfuerzo como uno de los valores fundamentales de la educación en la comunidad.
El sistema de baremación fortalece la importancia de los vínculos familiares, otorgando 15 puntos por un hermano ya matriculado en el mismo centro, y 30 puntos si hay dos o más hermanos. Además, se mantiene el criterio de zona única de escolarización, ampliamente aceptado por las familias madrileñas, preservando la idea de que la proximidad no limita la elección de centro.
Otras variables, como la renta familiar limitada a perceptores de ayudas sociales, discapacidad, y la condición de antiguo alumno de los padres o hermanos, también jugarán un papel en la asignación de puntos, mostrando así un proceso que intenta balancear equidad y elección personal dentro del marco de la oferta educativa de Madrid.