En la Comunidad de Madrid, el esfuerzo por fortalecer el bilingüismo y la competencia en lenguas extranjeras avanza con firmeza gracias a la colaboración de auxiliares de conversación en una amplia variedad de centros educativos. Estos profesionales apoyan a docentes en 406 colegios públicos de Educación Infantil y Primaria, así como en 196 institutos de secundaria bilingües y otros 189 que no lo son. Además, su influencia se extiende a 13 centros con proyectos de Formación Profesional y a 21 Secciones lingüísticas de francés y seis de alemán, reforzando así el aprendizaje de diversas lenguas en toda la región.
Pero el apoyo no se limita solo a estos niveles educativos. En un esfuerzo por fomentar la enseñanza del inglés desde los primeros años, estos auxiliares también colaboran con profesores de inglés en 57 Escuelas Infantiles y en 48 centros públicos de Educación Infantil y Primaria que han implementado la etapa de 0 a 3 años. Este enfoque temprano es parte de la amplia estrategia para integrar el bilingüismo en más áreas del sistema educativo madrileño.
Muchos de los auxiliares que participan en estos programas forman parte activa de proyectos educativos específicos promovidos por la Consejería de Educación, Ciencia y Universidades. Iniciativas como Global Classrooms, ArchiT3D, Ready, Steady, Go!, y Global Scholars Madrid son ejemplos de los esfuerzos dirigidos a fomentar un ambiente académico que no solo prioriza el aprendizaje del inglés, sino que también busca integrar de manera efectiva diversos modelos de enseñanza bilingüe.
En paralelo, la región ha dado un paso más al lanzar este mes un curso de formación diseñado específicamente para preparar a los docentes en la prueba de habilitación lingüística en inglés, un requisito clave para asumir puestos bilingües en la región madrileña. Este curso, dirigido a maestros y profesores de centros sostenidos con fondos públicos, ofrece 80 horas de formación semipresencial. Durante el programa, se trabajan habilidades esenciales como la lectura, escritura, comprensión auditiva y expresión oral, al mismo tiempo que se profundiza en la metodología CLIL (Content and Language Integrated Learning), que integra el contenido y el aprendizaje del idioma en la enseñanza de asignaturas.
Con estos pasos, la Comunidad de Madrid reafirma su compromiso con una educación bilingüe de calidad que no solo busca mejorar la competencia lingüística de los estudiantes, sino también preparar a los docentes con herramientas innovadoras y efectivas para enfrentar los desafíos de la enseñanza en un mundo cada vez más globalizado. La apuesta por la formación continua y el apoyo en el aula son prueba de una estrategia integral que mira al futuro de la educación con optimismo y determinación.