En la actualidad, un fenómeno que está capturando la atención es el de las parejas conocidas como LAT (Living Apart Together), que deciden no convivir incluso tras formalizar su relación matrimonial. Este modelo de pareja está ganando popularidad en una sociedad donde el individualismo se ha convertido en una característica predominante. Las parejas LAT optan por mantener hogares separados por diversas razones, como la satisfacción personal, la independencia y la satisfacción profesional, desafiando así las normas tradicionales de convivencia conyugal.
Expertos en sociología y relaciones afirman que este tipo de unión ha llegado para quedarse, reflejando cambios profundos en las dinámicas sociales y familiares. A medida que más personas valoran su autonomía y se enfocan en sus propias metas y necesidades, las parejas LAT representan una solución viable y en crecimiento. Esta tendencia pone de manifiesto la evolución de las relaciones personales hacia modelos más flexibles y adaptativos, respondiendo a los cambios en la estructura y expectativas de la vida moderna.
Leer noticia completa en El Mundo.