Un individuo que ocupa ilegalmente una vivienda en Madrid ha generado polémica por su lujoso estilo de vida. Durante meses, este okupa ha sido testigo de numerosas visitas y mantiene un servicio doméstico interno. Además, posee dos coches de alta gama que están estacionados en el edificio, lo cual contrasta notablemente con su condición de ocupante ilegal.
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