En el ámbito del XII Foro Urbano Mundial WUF12, que se desarrolla en El Cairo bajo la organización de ONU-Hábitat, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha puesto en relieve el notable ascenso de la capital española en el escenario turístico global. Durante su participación en el panel titulado «Turismo urbano: políticas y gobernanza para ciudades más sostenibles, inclusivas, creativas y resilientes», Almeida expuso las estrategias pioneras que el Ayuntamiento de Madrid ha implementado para consolidar a la ciudad como un destino turístico de primer nivel.
Almeida destacó que Madrid ha logrado escalonar posiciones en la lista de destinos urbanos más atractivos del mundo, según el informe de Euromonitor, escalando del puesto 47 al 3 en apenas cinco años. Este auge, aseguró, posiciona a la ciudad como un competidor en igualdad de condiciones con las principales urbes del planeta. Asimismo, subrayó la importancia de reforzar infraestructuras clave, como la modernización del Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, para satisfacer las crecientes demandas del sector turístico.
El alcalde también hizo hincapié en que el turismo constituye una parte vital de la economía española, generando un impacto significativo del 12% en el PIB nacional. En este sentido, promovió la importancia de un plan estratégico de turismo que busque un desarrollo equilibrado, al tiempo que mitiga los efectos adversos sobre los residentes locales, como la gentrificación y la expansión de las viviendas turísticas.
Almeida propuso la adopción de medidas que fomenten tanto la descentralización como la desestacionalización del turismo, apuntalando la imagen de Madrid como un destino preferente para congresos internacionales. Enfatizó que la ciudad avanza como un ejemplo de sostenibilidad en términos sociales, ambientales y económicos, y reiteró la necesidad de mejorar el espacio público y la regeneración urbana para aumentar la habitabilidad tanto para los madrileños como para los turistas.
En su discurso, el alcalde argumentó que en un mundo cada vez más interconectado, las urbes deben asumir un papel protagónico en la gobernanza global. Abogó por otorgar mayor peso a las ciudades en las instituciones europeas, con el objetivo de facilitar una administración más eficaz de estos núcleos poblacionales que albergan al 50% de la población mundial. De esta manera, invitó a que las ciudades ejerzan el liderazgo que sus ciudadanos ya les confieren, promoviendo cambios estructurales que fortalezcan su posición en el actual panorama global.
