Esta mañana, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, junto con varias personalidades del ámbito municipal y social, presentó la duodécima edición de la Carrera Madrid en Marcha Contra el Cáncer, organizada por la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC). El evento, que tendrá lugar el próximo 30 de marzo, busca congregar a una multitud solidaria en el emblemático paseo de la Castellana.
En la edición anterior, la carrera logró reunir a 23.000 participantes, y este año la AECC se ha fijado el ambicioso objetivo de alcanzar los 27.000, una meta en la que Martínez-Almeida confía como muestra del compromiso de los madrileños en la lucha contra el cáncer. «Cada pequeño gesto cuenta en la lucha contra el cáncer y contribuye a ganar una batalla», afirmó el alcalde en su intervención, añadiendo que «llenar las calles de Madrid con esperanza y apoyo» es vital para el éxito de esta causa.
El circuito de la carrera ofrecerá dos recorridos: uno de 4,5 km, que se podrá realizar corriendo o andando, y otro de 10 km para los corredores más experimentados. Adicionalmente, se celebrarán carreras infantiles en la plaza de Colón, permitiendo así la participación de niños de entre 4 y 12 años en un espacio diseñado para actividades familiares.
La AECC, una institución sin ánimo de lucro active desde 1953, ha reafirmado su compromiso de mejorar la calidad de vida de los afectados por el cáncer. Con vistas a 2030, se ha propuesto un ambicioso reto: alcanzar el 70 % de supervivencia entre los pacientes, para lo cual planea invertir más de 143 millones de euros en más de 750 proyectos de investigación. Un ejército de 1.500 investigadores participa en esta misión, subrayando así el papel fundamental que el impulso científico y la colaboración social tienen en la lucha contra esta devastadora enfermedad.
Con la expectativa de llenar nuevamente las calles con una «marea verde» de solidaridad, el llamado es claro: cada paso cuenta en la batalla contra el cáncer, y la participación masiva no sólo ayuda a recaudar fondos vitales, sino que también envía un contundente mensaje de unidad y esperanza.
