La ciudad de Madrid ha experimentado una notable recuperación de la normalidad tras un reciente apagón que afectó a los servicios esenciales y el transporte. Este martes, todas las líneas de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) están plenamente operativas. Además, los autobuses ofrecen viajes gratuitos para facilitar el desplazamiento de los ciudadanos. En comparación con un día típico, el tráfico ha disminuido en un 30 %, y el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) es gratuito hasta las 15:00 horas.
Los taxis y vehículos de transporte con conductor (VTC) están disponibles para operar sin restricciones. Asimismo, se han reabierto los túneles de la M-30 y otros túneles urbanos, restaurando la circulación regular en la ciudad. Los servicios comunitarios también funcionan con normalidad; los centros municipales para mayores, las escuelas infantiles municipales, y las bibliotecas del Ayuntamiento de Madrid están operativos. Además, el Servicio de Teleasistencia sigue manteniendo contacto con sus usuarios durante el día.
Mercamadrid, el principal centro de distribución de alimentos frescos de España, así como todos los mercados municipales, operan sin contratiempos, garantizando el abastecimiento en la capital.
Tras el apagón, Madrid convocó una reunión en el Centro Integral de Seguridad y Emergencias (CISEM) para evaluar la situación. Durante la crisis, más de 17,000 trabajadores municipales se movilizaron para mitigar sus efectos. Entre ellos, más de 5,000 del Área de Políticas Sociales, Familia e Igualdad aseguraron la continuidad de servicios esenciales, como el SAMUR Social y las escuelas infantiles, algunas de las cuales permanecieron abiertas hasta las 21:00 horas.
La policía municipal intensificó su presencia con más de 4,400 efectivos, triplicando su despliegue habitual. A este esfuerzo se sumaron 6,575 trabajadores de EMT Madrid, 500 sanitarios de SAMUR-Protección Civil, más de 320 bomberos y 300 agentes de movilidad, estos últimos trabajando en turnos dobles para gestionar la situación emergente.
Gracias a este esfuerzo colectivo, Madrid ha recuperado rápidamente su pulso habitual, demostrando una vez más la eficacia y compromiso de sus servicios municipales.
