Los agricultores españoles están a punto de experimentar un notable aumento en el rendimiento de sus explotaciones gracias a un acuerdo estratégico firmado entre el Banco Santander y Elian Barcelona. Esta colaboración busca fomentar el cultivo de diversas variedades de soja no transgénica, prometiendo un alto rendimiento económico y beneficios ambientales significativos, como la reducción del consumo de agua y el enriquecimiento natural del suelo mediante la adición de nitrógeno.
La firma del convenio tuvo lugar el 15 de julio de 2025, con la participación de Javier Cortadellas, director de Clientes, Rentabilidad e Instituciones de Santander España, y Andrés Martín, CEO de Elian. Durante el evento, Cortadellas reiteró el firme compromiso del banco con el sector agroalimentario, que ya incluye a más de 425.000 clientes. En un contexto de desafíos como el cambio climático y el cambio en los hábitos de consumo, Santander apunta hacia un modelo de producción más sostenible y escalable.
Por su parte, Martín destacó la dedicación de Elian para promover una cadena de alimentación saludable, sostenible y eficiente desde su fundación en 2021. La firma se inscribe en un esfuerzo concertado para integrar a todos los actores de la cadena productiva, enfocándose en una agricultura de valor añadido y proximidad.
Elian Barcelona, con una planta procesadora de soja capaz de manejar hasta 2.500 toneladas diarias, se consolida como un protagonista importante en el sector. Con sede en Barcelona, Elian cuenta con un equipo de especialistas en alimentación, gestión industrial, innovación y agricultura.
El Banco Santander ha reforzado su compromiso con el sector agroalimentario en España, canalizando 2.975 millones de euros en la primera mitad del año 2025, lo que representa un incremento del 20% en comparación con el año anterior. Este esfuerzo se complementa con la remodelación de oficinas para adaptarlas a las necesidades del Negocio Agro, estableciendo 125 sucursales especializadas, cada una equipada con personal experto para asistir a agricultores y ganaderos.
Este acuerdo no solo ofrece a los agricultores españoles recursos y herramientas para mejorar su rentabilidad, sino que también impulsa prácticas agrícolas más sostenibles, alineándose con las necesidades de un mundo en constante cambio.