Un potente terremoto de magnitud 8,8 ha estremecido la península de Kamchatka, en el extremo oriental de Rusia, alrededor de las 11:25, hora local, del miércoles. El sismo ha provocado olas de hasta 4 metros de altura, desencadenando alertas de tsunami en las costas del Pacífico, desde Japón hasta Alaska y Hawái. Las autoridades en estos territorios han emitido advertencias urgentes para evacuar las zonas costeras, subrayando el riesgo de daños significativos. El Centro de Alerta de Tsunamis de Washington ha señalado la posibilidad de daños en Hawai, mientras que el Servicio Geológico de Estados Unidos ha localizado el epicentro a unos 18,2 kilómetros bajo el lecho marino.
En Japón, aunque el sismo registró apenas un nivel dos en su escala sísmica, las autoridades han emitido avisos de evacuación en las zonas costeras del sudeste y sur de la isla de Hokkaido. El movimiento telúrico también ha generado una alerta de tsunami de hasta 3 metros, afectando potencialmente a otras prefecturas del noreste del país. Las bahías de Tokio y Osaka se mantienen bajo aviso por olas de hasta 1 metro de altura, mientras se monitorean las condiciones en tiempo real. La situación sigue evolucionando y las autoridades están en máxima alerta para prevenir cualquier eventualidad adicional.
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