En un nuevo episodio de tensión entre el Ayuntamiento de Getafe y la Comunidad de Madrid, la alcaldesa Sara Hernández ha denunciado la crítica situación del Parque de Bomberos de la ciudad. Según Hernández, las condiciones precarias de las instalaciones y el equipamiento obsoleto ponen en peligro tanto a los bomberos como a los habitantes del municipio.
Hernández detalla que la falta de mantenimiento se traduce en vehículos averiados y material caducado, junto a promesas incumplidas por parte del Gobierno regional. «Nos encontramos con unas instalaciones absolutamente saturadas», manifestó, subrayando problemas de climatización y fugas de agua que comprometen la estructura del edificio.
La alcaldesa también criticó la decisión de centralizar en Getafe el servicio de emergencias de sustancias químicas, lo que según ella deja al municipio sin cobertura adecuada en caso de emergencia. «Pagamos más de 3.200.000 euros al año y el servicio no es el adecuado», agregó.
A pesar de las reiteradas promesas de un nuevo parque, la construcción acumula retrasos significativos. Hernández afirma que el Gobierno regional presentó incorrectamente la licencia necesaria, retrasando las obras al menos hasta 2026.
Israel Naveso, representante sindical de los bomberos, expresó su frustración ante esta situación: «Los trabajadores decimos basta. Nuestras condiciones laborales no son dignas, y la Comunidad de Madrid sigue sin actuar al respecto».
Ayuntamiento y sindicato critican la gestión de la presidenta regional Isabel Díaz Ayuso y el consejero Carlos Novillo, acusándolos de poner en riesgo la seguridad de más de 200,000 vecinos y el entorno metropolitano sur con su falta de acción.
Mientras la disputa continúa, las promesas de mejoras se sienten lejanas, y la seguridad de Getafe pende de un hilo cada vez más delgado.