El Centro de Supercomputación Leibniz (LRZ) ha anunciado la próxima puesta en marcha de Blue Lion, un superordenador que promete revolucionar el panorama de la supercomputación al multiplicar por 30 la potencia de su predecesor, el SuperMUC-NG. Este avance se basa en la incorporación de la arquitectura NVIDIA Vera Rubin, diseñada para liderar una nueva ola de inteligencia artificial y computación científica.
La arquitectura Vera Rubin integra el innovador Rubin GPU, sucesor de Blackwell, y la Vera CPU, un procesador desarrollado a medida para trabajar de manera óptima con la GPU. El objetivo principal de esta integración es fusionar simulación, análisis de datos e inteligencia artificial en una única plataforma, permitiendo un alto ancho de banda y baja latencia. La implementación de este sistema se espera para la segunda mitad de 2026.
Además, Blue Lion será construido por HPE, utilizando tecnología avanzada de HPE Cray y un sistema de refrigeración líquida que no solo mejora la eficiencia energética, sino que aprovecha el calor residual para climatizar edificios adyacentes. Este diseño sostenible está pensado para soportar trabajos en áreas como la ciencia climática, la física y el machine learning.
La arquitectura Vera Rubin no solo está teniendo un impacto en Europa. En Estados Unidos, el laboratorio nacional Lawrence Berkeley ha anunciado su propio superordenador, Doudna, basado en la misma tecnología. Doudna se centrará en el procesamiento científico en tiempo real, mejorando la eficiencia energética hasta cinco veces comparado con su predecesor. Esto permitirá el análisis inmediato de grandes volúmenes de datos en campos como la astronomía y la genómica.
Este desarrollo marca un cambio significativo en la supercomputación, donde la inteligencia artificial se convierte en un componente esencial y no un complemento. NVIDIA sostiene que los sistemas del futuro deberán integrar simulación, IA y procesamiento de datos en tiempo real, facilitando flujos de trabajo más ágiles y colaborativos. La arquitectura Vera Rubin es la respuesta de NVIDIA a esta demanda.
Además del hardware, NVIDIA subraya la importancia del talento humano, destacando a figuras como Adeola Adesoba, una arquitecta de soluciones especializada en IA cuyo trabajo refuerza el compromiso de la compañía con la diversidad y el impacto social.
El lanzamiento de Blue Lion y Doudna señala el comienzo de una nueva era en supercomputación, donde ciencia e inteligencia artificial avanzan juntos. Europa y el mundo entero se preparan para ver cómo estas innovaciones transforman la investigación y el desarrollo tecnológico en los años venideros.
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