El cantante Alejandro Sanz ha mostrado su preocupación tras las acusaciones de Ivet Playà, una joven admiradora que lo ha tildado de mantener «comportamientos inmorales». Durante una reciente entrevista en el programa de Telecinco, «De Viernes», Playà reveló que su relación con Sanz, que comenzó cuando ella era mayor de edad, cambió drásticamente después de un vínculo sexual, señalando que el artista que ella admiraba no era el mismo que conoció después. Según sus palabras, se sintió «preparada» para hablar de su experiencia y aclarar que, aunque había consentido, sus percepciones sobre el cantante mutaron drásticamente.
A raíz de estas declaraciones, Sanz utilizó las redes sociales para dirigirse a sus seguidores, asegurando que su deseo es continuar con su música y agradeciendo el apoyo recibido en los días difíciles. En varios mensajes, merced a su cuenta en X, el cantante expresó su gratitud hacia aquellos que han estado a su lado, resaltando que la verdadera amistad e valentía se demuestran en momentos complicados. La controversia ha generado una ola de reacciones entre sus fans y en el ámbito mediático, dejando abierto el debate sobre la responsabilidad de las figuras públicas en sus relaciones personales.
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