El inicio del año 2025 ha estado marcado por fluctuaciones significativas en los mercados energéticos europeos, con un aumento notable en los precios del gas y un alza igualmente destacada en la producción de energía eólica en varios países. Según los datos más recientes, el mercado de futuros del gas TTF en Europa logró romper la barrera de los 50 €/MWh, cifra que no se veía desde octubre de 2023. Este aumento se debe principalmente a diversos factores, entre los que destacan el incremento en los precios de las emisiones de CO2, un repunte en la demanda eléctrica, y una disminución considerable en la producción solar fotovoltaica.
Particularmente, la producción solar en la última semana de diciembre sufrió descensos importantes. En Alemania, la disminución fue del 29%, hecho que marcó la tendencia entre los países europeos, seguido por Francia y Portugal con una caída del 25%. Italia, sin embargo, mostró una caída más moderada de un 6,6%, mientras que en España se registró un descenso del 17%. Se anticipa una recuperación en Alemania, aunque se espera que Italia y España mantengan la línea descendente.
Contrariamente, la energía eólica pintó un panorama más alentador, con un aumento significativo en la mayoría de los mercados europeos. Alemania y Francia informaron aumentos drásticos en su generación eólica del 148% y 140%, respectivamente. En la península ibérica, tanto Portugal como España experimentaron incrementos, del 12% y el 19% respectivamente. Particularmente, Portugal alcanzó su segundo nivel más alto de producción eólica histórica el 5 de enero, con 108 GWh, destacando la robustez de sus fuentes renovables.
Este incremento en la producción eólica ha contribuido a amortiguar el impacto del alza de los precios del gas en algunos mercados eléctricos europeos, proporcionando una alternativa más económica y sostenible frente a la fluctuación del mercado de combustibles fósiles. No obstante, la demanda eléctrica mostró un ascenso generalizado, atribuido tanto al incremento de la actividad económica tras las festividades como al descenso de las temperaturas en el continente. Alemania registró un aumento del 8,6% en la demanda, liderando el repunte en Europa, seguido por Gran Bretaña y Francia, aunque se prevé un descenso en este último durante la segunda semana de enero.
El dinamismo de los precios eléctricos en Europa se ha mantenido heterogéneo en este inicio de año. Mientras que el mercado MIBEL, que engloba España y Portugal, y el IPEX en Italia experimentaron un aumento en sus costes, el EPEX SPOT en Alemania registró un descenso de precios. No obstante, los precios semanales promedios sobrepasaron los 85 €/MWh en la mayoría de los mercados, haciendo sombra sobre los mercados nórdicos y alemán, que se mantuvieron por debajo de esta cifra.
Paralelamente, los futuros del petróleo Brent y las emisiones de CO2 reflejaron aumentos en sus precios, reforzados por expectativas de mayor demanda y por factores políticos globales que juegan un papel crucial en la configuración de este entorno energético cambiante. A medida que el 2025 avanza, la atención se centra en las alteraciones en las dinámicas de producción y demanda, así como en las políticas energéticas que continúan esculpiendo los mercados europeos y globales.