El inicio de semana en el ámbito político está dominado por la declaración de Víctor de Aldama ante el Tribunal Supremo, enmarcada dentro del conocido «caso Koldo». Este escándalo gira en torno al pago de comisiones ilegales relacionadas con la compra de mascarillas y equipo sanitario durante la pandemia, implicando a figuras del Ministerio de Transportes bajo la dirección de José Luis Ábalos. Junto a Aldama, quien fue recluido en prisión el pasado noviembre por un fraude millonario en el ámbito de los hidrocarburos y recién liberado tras testificar ante la Audiencia Nacional, también está implicado Koldo García, exasesor de Ábalos. Se espera que García comparezca ante el juez encargado del caso, Leopoldo Puente, esta semana.
El testimonio de Aldama, sembrado de acusaciones sin pruebas contundentes, toca a figuras prominentes del gobierno, tales como el exministro Ábalos, el ministro Ángel Víctor Torres y miembros del PSOE, incluidos nombres como Santos Cerdán. La política está pendiente de si Aldama respaldará sus declaraciones previas ante la máxima corte, especialmente después de que José Luis Ábalos ofreciera su declaración la semana pasada. Este contexto añade un clima de tensión política para el gobierno, mientras el Partido Popular intensifica su esfuerzo en destacar presuntos casos de corrupción dentro del oficialismo, configurando un escenario clave para la agenda política de los próximos días.
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