Alcaldes de Junts per Catalunya han viajado a Waterloo, Bélgica, para reunirse con Carles Puigdemont, expresidente de la Generalitat y líder del partido, con el fin de discutir temas urgentes como la inmigración, la ocupación de viviendas y la lucha contra la multirreincidencia. Este encuentro, impulsado por el alcalde de Sant Cugat, Josep Maria Vallès, responde a problemas de convivencia en varios municipios y la creciente presión de Aliança Catalana, un partido de extrema derecha que amenaza con captar votos nacionalistas en las próximas elecciones municipales.
La reunión, que también incluye al secretario general de Junts, Jordi Turull, busca la definición de una nueva estrategia política que permita a los candidatos del partido pactar con mayor libertad en futuras elecciones. Algunos alcaldes han cuestionado la resistencia de Puigdemont a acuerdos con el PSC y sugieren valorar posibles pactos con Aliança Catalana donde sea beneficioso. Además, intentan consolidar su posición en temas migratorios, especialmente después del fracaso para transferir competencias sobre inmigración a la Generalitat, una cuestión que resuena fuertemente en el debate social catalán.
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