El pleno municipal ha dado luz verde a una nueva medida urbanística que promete transformar el paisaje de la ciudad. El plan, aprobado por mayoría, contempla la renovación de varias áreas urbanas con la intención de mejorar la infraestructura y los servicios públicos. Durante la sesión, se debatieron aspectos clave del proyecto, que busca no solo modernizar la arquitectura urbana, sino también integrar más espacios verdes y fomentar el uso de transporte público sostenible. La administración local ha destacado que este movimiento no solo responde a las necesidades inmediatas de la población, sino que también se anticipa al crecimiento demográfico esperado en los próximos años.
La iniciativa ha generado diversas reacciones entre los residentes y líderes comunitarios. Mientras que algunos celebran la perspectiva de contar con una ciudad más moderna y habitable, otros han expresado preocupaciones respecto al posible desplazamiento de comunidades y el impacto en los pequeños comercios. Los representantes municipales han asegurado que se implementarán medidas de mitigación para evitar tales escenarios, promoviendo un enfoque inclusivo que contemple la participación ciudadana. En las próximas semanas, se prevé el inicio de las primeras fases del proyecto, marcando así el comienzo de una ambiciosa transformación urbana.
Leer noticia completa en El Mundo.