En un emotivo regreso al escenario, Aitana volvió a interpretar «Lo malo» junto a Ana Guerra, en un concierto donde se destacó el camino de la joven estrella desde sus inicios humildes hasta su consolidación en la industria musical latina. En el Estadi Olímpic de Barcelona, los fans vivieron momentos inolvidables, especialmente cuando la plataforma central alzó a Aitana durante su interpretación de «6 de febrero», un tema que ella misma describió como un potencial éxito desde su creación. El ambiente vibrante se contagió a lo largo del espectáculo, con la audiencia entregándose por completo a cada canción.
El show, parte de su minigira «Metamorfosis Season», contó con sorpresas como la colaboración con Josep Montero en «La gent que estimo» y una energética interpretación de «Mon amour». La potencia del evento no descansó solo en su música, sino en la conexión genuina que Aitana logra establecer con su público, en su mayoría adolescentes. A lo largo de la noche, su capacidad para emocionarse y emocionar fue más que evidente, como en el momento en que compartió escena con el veterano Pep Sala para interpretar «Boig per tu». Su crecimiento como artista refleja un cambio constante, una evolución que resuena profundamente con quienes la siguen. Aitana no solo ofreció música, sino una experiencia compartida de sentimientos y recuerdos, mostrando una vez más su don para la complicidad con sus fans.
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