La Comunidad de Madrid ha anunciado un nuevo plan de movilidad urbana que busca reducir el tráfico vehicular y fomentar el uso del transporte público. Este proyecto, que implementará una serie de medidas a partir del próximo año, pretende disminuir las emisiones de gases contaminantes en un 20% para 2030. Entre las principales acciones se encuentra la ampliación de las líneas de metro y autobuses, así como la creación de nuevas ciclovías para promover el uso de bicicletas en la ciudad. El gobierno regional también planea introducir incentivos económicos para aquellos ciudadanos que opten por el transporte compartido y sostenible, buscando así una movilidad más eficiente y ecológica.
Paralelamente, se implementarán zonas de bajas emisiones en varias áreas céntricas de la capital, restringiendo el acceso de vehículos más contaminantes. Los residentes y aquellos con vehículos ecológicos obtendrán permisos especiales para circular en estas áreas, incentivando la transición hacia modelos de transporte más limpios. Además, se realizarán campañas informativas para concienciar a la población sobre la importancia de estas medidas para el medio ambiente. Este ambicioso plan cuenta con el respaldo de diversos colectivos ecologistas y urbanistas que ven en él un paso crucial hacia un Madrid más sostenible y habitable.
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