El Ministerio de Sanidad de España ha reiterado su compromiso con el abordaje del cáncer infantil, al conocerse que en el año 2024 se prevén 1.049 casos en menores de 15 años en el país. Esta cifra se complementa con los 573 casos adicionales que corresponden a adolescentes de entre 15 y 19 años, según datos del Registro Español de Tumores Infantiles (RETI).
La conmemoración del Día Mundial contra el Cáncer Infantil, cada 15 de febrero, pone de relieve la importancia de abordar esta problemática que impacta de manera crucial a un grupo especialmente vulnerable: los pacientes pediátricos y sus familias. En respuesta, el Sistema Nacional de Salud (SNS) cuenta con una Estrategia en Cáncer, actualizada en 2021, que incorpora acciones específicas para mejorar el tratamiento de esta enfermedad en la infancia.
Un elemento clave en esta estrategia es el Acuerdo para la Organización asistencial del cáncer infantil y de la adolescencia, aprobado en 2018 y actualizado en 2021. Este acuerdo establece la necesidad de centralizar la atención en centros con experiencia, mediante equipos multidisciplinarios y la creación de comités autonómicos de coordinación asistencial. Además, se promueve el trabajo en red con otras unidades implicadas en la atención de menores con cáncer.
Además, la estrategia busca mejorar la implementación de este acuerdo y analizar la organización actual del tratamiento de tumores del sistema nervioso central. También se están llevando a cabo actividades formativas para mejorar el diagnóstico del cáncer infantil por parte de profesionales de Atención Primaria.
El esfuerzo para recopilar datos y analizar tendencias está respaldado por el convenio entre el Ministerio de Sanidad y la Universidad de Valencia, que facilita el mantenimiento del RETI. A través de este registro, se puede evaluar la supervivencia y su evolución en comparación con otros países europeos, lo que proporciona una medida de las mejoras asistenciales en España.
Aunque la incidencia de patologías oncohematológicas en la niñez y adolescencia ha aumentado, la mortalidad ha disminuido gracias a los avances en el tratamiento del cáncer en las últimas décadas. No obstante, este incremento en la supervivencia también implica un mayor riesgo de secuelas médicas o psicológicas, que afectan la calidad de vida de los pacientes y sus familias.
Por esta razón, la Estrategia en Cáncer del SNS enfatiza la importancia del seguimiento continuo de los supervivientes de cáncer infantil y adolescente. En la actualidad, se están desarrollando planes individualizados de seguimiento para guiar tanto a pacientes como a profesionales en las acciones y recursos necesarios para su atención post-tratamiento.
A nivel europeo, España participa activamente en la creación de redes de conocimiento experto a través de la Acción Conjunta JANE y su continuación, JANE 2. Estas redes se centrarán en adolescentes y adultos jóvenes con cáncer, mejorando la asistencia y calidad de vida de este grupo de pacientes. Las nuevas redes proporcionarán recursos y evidencia en atención sanitaria, fomentando un acceso equitativo y teniendo un impacto positivo en las políticas públicas.
Fuente: Ministerio de Sanidad