Un ataque del Ejército ruso en la ciudad de Zaporiyia, al este de Ucrania, ha dejado al menos 30 personas heridas, incluidas lesiones graves en un niño de 13 años. Según informó el gobernador regional Ivan Federov, las víctimas sufrieron conmociones cerebrales, heridas por explosión, cortes, quemaduras y fracturas. Hasta el momento, doce personas permanecen hospitalizadas recibiendo atención médica. Inicialmente, se había reportado la muerte de un hombre de 61 años encontrado entre los escombros, pero esa información fue desmentida más tarde por las autoridades.
El ataque, que ocurrió en la noche del jueves, implicó al menos 10 ofensivas que causaron daños considerables en edificios residenciales, una universidad y una infraestructura crítica. Estos eventos han generado una creciente preocupación en la región, que sigue bajo la presión constante de las ofensivas rusas. Federov, a través de su canal de Telegram, ha comunicado los esfuerzos que se están realizando para atender a los heridos y evaluar el alcance total de los daños en la ciudad. El clima de tensión y el impacto en la vida diaria de los residentes continúan siendo evidentes en Zaporiyia.
Leer noticia completa en El Pais.