Este lunes, tras los intensos cónclaves del PSOE y el Partido Popular, las direcciones de ambos partidos se reúnen para evaluar la situación política actual. La atención se centra en la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, prevista para el miércoles en el Congreso, donde se espera que explique el caso que involucra a los ex secretarios de organización del PSOE, José Luis Ábalos y Santos Cerdán. Este último se encuentra en prisión, lo que ha sacudido al partido. La reunión responde a la necesidad de gestionar una posible crisis interna y preparar estrategias ante los nuevos desafíos políticos que se presentan esta semana.
Paralelamente, el Tribunal Supremo será escenario de importantes declaraciones de empresarios implicados en el escándalo. Ambos, Antxon Alonso de Servinabar y Fernando Merino, exdirectivo de Acciona, están bajo la lupa por la presunta trama de sobornos a cambio de contratos públicos. Alonso firmó un contrato con Cerdán comprometiéndose a pagar una importante suma por una participación en la empresa, considerada clave en esta red de corrupción. Estos eventos han intensificado el escrutinio público y la presión sobre el gobierno y los partidos, generando un ambiente de expectación en la esfera política nacional.
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