El 112, el número único de emergencias en España y Europa, se prepara para una transformación histórica. A partir del 28 de junio de 2025, gracias al Acta Europea de Accesibilidad (EAA), este servicio garantizará que todos los ciudadanos, independientemente de sus capacidades o idioma, puedan acceder a una atención de emergencia rápida y efectiva.
Un número para todos los ciudadanos de Europa
El 112 nació en 1991 como iniciativa de la Unión Europea para unificar los números de emergencia en todos los países miembros. Hasta entonces, cada país contaba con números diferentes para bomberos, policía o emergencias médicas, lo que generaba confusión, especialmente para turistas y viajeros. Con su implementación, cualquier persona en Europa puede acceder al mismo número de emergencia, las 24 horas del día, desde cualquier lugar.
En España, el 112 comenzó a operar en 1996 y alcanzó cobertura nacional en 1999. Actualmente, es gestionado por las comunidades autónomas, lo que permite una atención específica según las necesidades regionales. Además de español, el servicio ofrece asistencia en inglés, francés y alemán, algo esencial en un país que recibe más de 80 millones de turistas anualmente.
El reto de la accesibilidad
Aunque el 112 ha demostrado ser eficaz y confiable, no todos los ciudadanos han tenido las mismas facilidades para utilizarlo. Las personas con discapacidad auditiva, visual o del habla enfrentan barreras significativas para acceder al servicio. Según datos recientes, menos del 20% de los servicios de emergencia en Europa están totalmente adaptados a personas con discapacidad.
El Acta Europea de Accesibilidad (EAA), aprobada por la Unión Europea, busca cambiar esta situación. A partir de 2025, todos los servicios de emergencia deberán cumplir con estrictos estándares de accesibilidad. En España, donde ya se han implementado avances tecnológicos significativos, este cambio supondrá una mejora adicional para garantizar que nadie quede excluido.
Tecnología para un 112 más inclusivo
Empresas como CESTEL (Centro Español de Servicios Telemáticos S.A.), especializadas en soluciones para la seguridad pública, han sido claves en la modernización del sistema. Algunas de las innovaciones que estarán disponibles incluyen:
- Mensajería en tiempo real: Las personas con discapacidad auditiva podrán comunicarse directamente con los operadores del 112 a través de mensajes de texto.
- Videointerpretación en lengua de signos: Permitirá a los usuarios sordos conectarse con intérpretes para explicar sus emergencias de manera precisa y rápida.
- Formatos accesibles de información: Las recomendaciones de seguridad estarán disponibles en braille, audiodescripciones y lenguaje sencillo, asegurando que todos puedan entender las instrucciones en caso de emergencia.
Estas mejoras no solo benefician a las personas con discapacidad, sino también a cualquier ciudadano que enfrente barreras de idioma o situaciones de comunicación complicadas durante una emergencia.
Un servicio adaptado a las necesidades del siglo XXI
En un mundo globalizado, donde los viajes y la movilidad son cada vez más frecuentes, el 112 se consolida como una herramienta esencial para garantizar la seguridad ciudadana. En 2025, el sistema será capaz de eliminar barreras idiomáticas mediante aplicaciones de traducción simultánea y plataformas digitales accesibles desde cualquier dispositivo móvil.
Por ejemplo, un turista que necesite asistencia en España podrá utilizar su móvil para contactar con el 112, incluso si no habla español. Las herramientas de traducción y la comunicación en tiempo real garantizarán una respuesta rápida y adecuada.
Un recorrido histórico con la vista en el futuro
Desde su creación en 1991, el 112 ha sido un modelo de colaboración y eficiencia en Europa. En España, ha salvado innumerables vidas gracias a su capacidad para coordinar a servicios como bomberos, emergencias médicas y protección civil. Con más de 40 millones de llamadas atendidas al año, su eficacia es indiscutible.
Sin embargo, los avances hacia la accesibilidad universal representan un cambio de paradigma. A partir de 2025, el sistema será un ejemplo de inclusión, asegurando que todas las personas, independientemente de sus capacidades, puedan recibir ayuda en situaciones críticas.
Un compromiso con la sociedad
El 112 no es solo un número de emergencias, sino un reflejo del compromiso de Europa con la seguridad y la inclusión. Al garantizar que todos los ciudadanos tengan acceso a este servicio, la Unión Europea da un paso decisivo hacia una sociedad más equitativa y solidaria. España, con su historial de innovación en el ámbito del 112, se sitúa a la vanguardia de esta transformación.
En 2025, cuando las nuevas medidas entren en vigor, el 112 será más que un número de emergencia: será un símbolo de accesibilidad y modernización, marcando un antes y un después en la manera en que entendemos la atención de emergencias.